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Moda, Revolución y Legado

La moda nace de un pensamiento revolucionario y se convierte en la manera de decirle al mundo lo que pensamos. Miles de acontecimientos históricos, de cambios sociales y de manifestaciones durante años han sido respaldadas con diferentes ideologías que se manifiestan a través de la ropa. Cada prenda adquiere un significado y un grito de liberación, pensamiento y posición con el que el mundo habla.

El 30 de mayo de 1968 fue uno de los días más revolucionarios de la historia. Miles de jóvenes en Francia, se tomaron las calles en protesta por el cierre de la Universidad de Nanterre y cansados también por las consecuencias que dejó la guerra de Vietnam, decidieron alzar su voz en contra de la sociedad que les había impuesto una vida ostentosa, frívola y sin sentido, y en contra de un sistema que les parecía obsoleto, autoritario y por supuesto opresivo. Sorpresivamente, dos semanas después, a esta lucha se habían unido diez millones de obreros que secundaron la protesta y paralizaron el funcionamiento de todo en Francia. Pero a pesar de que para julio ya todo había vuelto a la normalidad, este episodio había cambiado al mundo entero.


Estos no solo fueron días de lucha y de jóvenes gritando “Prohibido prohibir” o “Haz el amor y no la guerra”, era también la voz de mujeres y hombres dispuestos a generar un cambio en el pensamiento de un mundo retrógrado en el que no se les permitía ser auténticos, en el que no tenían libertad sexual y en el que la guerra siempre era la primera en la lista. Gracias a este día, las mujeres lograron mostrar su inconformidad por tener que parecerse a sus madres y seguir con los excesos que significaba pertenecer a la clase alta francesa. Demostraron que no querían seguir viviendo en una sociedad que las minimizaba como ciudadanas y lejos de seguir siendo las mujeres elegantes y refinadas que eran obligadas a ser, decidieron experimentar con su sensualidad, siendo atrevidas y arriesgadas.


En medio de esta revolución, Yves St Laurent fue el primer diseñador en entender las necesidades de esta nueva juventud cargada de ideas revolucionarias y de cambios ideológicos, lanza así su primera colección “Pret - a - Porter” con la que modificaría la industria para siempre, dándole la posibilidad a todos de estar a la moda sin ser exclusiva para la clase alta.


De aquí nacen también prendas icónicas y ahora básicas, con las que llevamos puesta la historia y las luchas de miles de jóvenes que pensaron el mundo diferente, las mini faldas impensables para la época con las que querían retar los pensamientos anticuados y puritanos de los adultos, las chaquetas o blazers con cortes masculinos, los jeans, pensados inicialmente como ropa de trabajo, y las transparencias entre otras, moldeaban los cuerpos juveniles ávidos de reconocimiento por su voz de lucha.

Actualmente, todas estas prendas hacen parte de nuestro armario, las usamos a diario y combinamos con otras prendas de tendencia, pero básicamente, llevamos puesta la historia, las luchas, miles de pensamientos y de una revolución que nació de unos jóvenes cansados de la sociedad de su época.


¿Aún crees que la moda es superficial?







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